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BLOQUE CRÍTICA

Las múltiples crisis en las que respiramos  -cada vez con mayor dificultad tanto por las dificultades existentes, como por las que sabemos y/o tememos aún estan por venir- son el desafío actual de quienes no creemos en lo ineluctable y seguimos apostando por transformaciones sociales emancipadoras. 

Sin embargo, a partir de la década de 1990, la capacidad de antagonismo tanto de lo que habitualmente llamamos movimientos sociales como de la izquierda en sentido amplio no solo no está a la altura de la profunda crisis ecosocial, sino que se encuentra severamente mermada. Los síntomas de estas discapacidades podrían leerse, en parte, en la desorientación generalizada, las dificultades organizativas, la dispersión de las luchas, la falta de ambición generalizada, la centralidad del ser (identidades desvinculadas de luchas reales y enfocadas en la autorreferencialidad y el autocuidado) y del decir (sobredimensión de lo comunicativo y lenguajes ideológicos desprovistos de contenido real), la esterilidad transformadora de las tendencias buenistas y ciudadanistas.  ¿Compartimos la percepción de estos síntomas? ¿Dónde pensamos que residen las causas? 

¿Qué “nos” ha pasado? ¿Qué ha sucedido en estas fuerzas de cambio que, en fuga de las organizaciones ideológicas y encorsetadas estructuras de partido de las izquierdas revolucionarias, concentraron tanta energía y liberaron tantas expectativas de transformación en los años 60’s y 70’s? 

El propósito del BLOQUE de CRÍTICA de este encuentro es tratar de identificar las principales causas, características y efectos principales de estas tendencias. 

¿Y para qué -podrían pensar algunxs-? ¿Acaso no tenemos ya suficientes problemas como para dedicarnos a arrojar piedras contra nuestros propios tejados? ¿No contribuiremos de esta forma a despotenciar aún más los espacios de lucha y a generar un clima de nihilismo generalizado? A nuestro modo de ver, obviamente no. Pensamos que apuntar a lo que falla, a lo que ya no cambia, a lo que ya no remueve y entender los porqués es la única manera de volver a generar y construir iniciativas con poder real de cambio. Hace falta cuestionarnos cuantas veces sea necesario.

La crítica es un motor de rebeldía y por eso en las mesas redondas y debates de este bloque nuestro propósito es realizar un recorrido analítico de los movimientos supuestamente más pujantes y a la vez hoy bastante pusilánimes de los que formamos parte. En concreto, del movimiento feminista y el LGTBI+, del ecologista y del antirracismo.