Made with love in Spain: reflexiones sobre el ciclo en marcha

Hemos participado en este programa de radio alemán donde se hace un análisis del contexto político español. Los compañeros Pablo Carmona, Raúl Sánchez y Montse Garcelán aportan claves fundamentales para entender el momento político. Para los que no sabemos alemán, dejamos aquí la transcripción de sus declaraciones que son parte de una pieza narrativa. (Añadimos también las de otros participantes como Marina Garcés, que hace interesantes aportaciones al debate.)

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(Marina Garcés)
Lo que tiene lugar ahora no sale de la nada, sino que nace de un humus, realmente de un cultivo de conceptos, de ideas, de personas, de redes de afectos también porque todos nos conocemos y mucho, y hemos hecho muchas cosas juntas durante muchos anos desde ciudades también muy dispares de España. Fíjate que en los medios de comunicación se insiste mucho en términos como de nueva política, una nueva generación, e.d. se insiste en que todo es nuevo, y nosotros decimos es nuevo para el régimen, es nuevo para el sistema. Pero hace más de 20 anos que hay una generación, esa generación de los que ahora tenemos en torno a los 40 y que se supone que no existíamos, que no hemos estado haciendo nada en ese país normal que era la España de la transición.

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(Montserrat Galcerán)
Yo te diría eso significa intentar salir del reduccionismo academicista que encierra el pensar y el saber en un marco muy codificado. Intentar salirse de este marco, intentar pensar, teorizar, investigar, producir conocimiento, pero en relación con los movimientos vivos que se dan en la sociedad.

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O sea hay un enorme digamos excedente de capacidad intelectual cognitiva que no ha sido absorbida por el mecanismo institucional dado su cerrazón y que de alguna manera se ha expandido fuera y que ha sido capaz de organizarse, coordinarse y hacer otras cosas, una especie de intectualidad de masas, pudiéramos decir, distribuida sobre toda la ciudad. Sobre todo Madrid es una ciudad muy rica en ese sentido, pero Barcelona lo mismo. O sea ese intelectual precariado juvenil crea un tejido muy potente. Los centros sociales, las librerías, los editoriales autogestionadas, los centros de barrio son fundamentales.

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(Raul Sánchez Cedillo)
Ha sido durante una fase en la que los llamados movimientos antisistémicos han sido importantes pero minoritarios y s.t. no han conseguido romper ese muro de cristal de una afectación fuerte y una capacidad de modificación fuerte de la población y de las instituciones.

(Pablo Carmona)
Hay una fuerte herencia de las formas de hacer política del movimiento antiglobalización, del movimiento global que de algún modo casan esa vieja idea de hacer política en red, casan muy bien con una sociedad que se mueve en red, y por eso yo creo que es muy interesante analizar como se lanzan formas de organización política que tienen que ver precisamente con la red y donde las herramientas tecnopolíticas – Twitter, Facebook, los whatsup, el telegram, todos los sistemas de microblogging, de blogs y demás – se amalgaman, se juntan y generan un cuerpo sólido que es capaz de poner en crisis el sistema.

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(Raul Sánchez Cedillo)
Hemos dicho antes que en 3 meses se ha calculado que el 15M afectó a 8 millones, en España hay 45, creo, e.d. es mucha gente, e.d. mucha gente, mucha gente que seguía viendo la tele peor, que no participa en redes sociales etc. etc., e.d. mucha gente. Y esa es la relación crítica del sistema, de su crecimiento, de su complejización, su productividad, el encuentro con ese afuera, con ese afuera de las personas, de las comunidades o de las formas de vida que no se han contagiado del virus, por decirlo así.

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Es decir que si la sociedad no participa hasta cierto punto, pues no habrá esa transformación, que todo depende de la autoconstitución de la sociedad.

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(Montserrat Garcelán)

Tenemos que pasárnoslo, decimos nosotras, hacerlo con ganas, con ilusión y experimentando esa potencia de trabajar en común. Esa pasión alegre de entre juntas podemos. Y eso es una maravilla que te quita todo este malestar, toda esta pasividad, toda esta soledad, y te da esta energía de: y si no podemos, podremos hasta donde podamos. Entonces las personas a lo mejor no quieren dedicarle 8 horas al día a la actividad política, entre otras cosas pq todo el mundo tiene montones de cosas, pero sí al menos en todo lo que te afecta poder ser consultado, no. Y eso me parece muy, muy importante. Porque ahí te quería decir una cosa porque también frente a la idea clásica, un poco la vieja izquierda, como de la política como una especie de misión salvífica que tu tienes que hacer en aras de otros, nosotras lo interpretamos más bien como algo que haces casi en primera persona.

Por Barbara Eisenmann, una Coproducción DLF/SWR

Aquí el guión completo (partes en alemán y en castellano).

Aquí el programa de radio (en alemán).